Me buscaban desde hace rato. Desde aquella vez, tú sabes Marcelo, de aquella vez de la sequía larga. De cuando no teníamos que comer, nada, naranjas hermano... Pero qué vas a saber tú si estabas muy chico.
El punto es que me buscaron con doña Juana. Y pues la muy sensata les vino a decir que ya no estaba en Paloalto, quesque me había venido a La Vereda a buscar un mejor trabajo.
La verdad es que vine a La Vereda tras de un amor perdido. El hombre no hace más que perseguir sus demonios, tu sabes. Los hombres no hacemos más que perseguir la mala fortuna.
Ya no me acuerdo a qué iba todo esto. Ah, sí, lo de que me estaban buscando de hace ya rato.
¿Oye por cierto ya
comiste? ¿Ya? Eh, no qué voy a andar
comiendo yo tan temprano. Pero vente a la cocina acá te sigo contando...
Según doña Juana:
* Mucho mucho, de nada nada.
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